MADRE ANTONIA CERINI

Introducción:

Fundadora del Instituto de Hermanas de San Antonio de Padua

Nació en Castellanza, provincia de Milán (Italia) el 13 de Noviembre de 1839; fueron sus padres: Angelina Muchettu y Pablo Cerini. En el santo Bautismo Luisa Antonia.

Familia pobre y de humilde condición, pero muy feliz porque la Fe y la Caridad abundaban en sus miembros.

A los 12 años hizo su Primera Comunión y a los 16 años ingresó en la Congregación de Hermanas de San Vicente de Paúl, el 24 de septiembre de 1855.

En las batallas de 1859, en Italia asistió a los heridos en sus hospitales en un hospital preparado para tal fin. Con suma caridad permanecía de día y noche a la cabecera de los enfermos, sin manifestar cansancio.

En 1871 a causa de la persecución levantada en Italia contra las Ordenes Religiosas, debe volver a su hogar.

Es entonces, en 1874, cuando se dirige a la Argentina.

ESCUCHA Y ACEPTA LA LLAMADA DE DIOS

A los 12 años, su alma se regocija por vez primera recibiendo a Jesús Sacramentado y pronto a sus 16 años, percibiendo la llamada del Señor, para seguirle más de cerca y como es de suponerse, no sin gran valor y dolor para separarse de los suyos, ingresa a la Congregación de Las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl,. El 24 de septiembre de 1855. En diciembre del mismo año recibe el Santo Hábito, con el nombre de Sor Ángela del Sagrado Corazón y el 24 de Abril de 1861 contando con 22 años, hace su Profesión.

UNA VOCACION PARA SERVIR           

Desde 1859 ha venido prestando servicios como enfermera en hospitales de campaña cuidando celosamente a los heridos dejados por la guerra iniciadas en ese año y que prolongará hasta 1870, en una convulsa Patria que bajo la dirección de Víctor Manuel II, busca su unidad política. Esta valiosa experiencia de sus abnegada labore como enfermera - religiosa, alternando con la catequesis a los niños y dentro del marco de una formación eminentemente Vicentina orientad por la concepción de la rectora del "amor operante al pueblo pobre".

FUNDACION DE LA CONGREGACION

Al principio de 1889, dos jóvenes más se le unen en sus propósito, poniéndose a sus órdenes, asumiéndola como Fundadora y madre dedicándose igual, a practicar la caridad con los enfermos. Seis meses conviven en perfecta unión, pero algunos desacuerdos entre las dos aspirantes las alejan por un tiempo; sin embargo, el entendimiento en la fe y en anhelo de la Obra, vuelve a unirlas y estando en número de tres, condición mínima para una nueva fundación, obtienen permiso para vestir el Santo Hábito. Así, él 4 de Octubre de 1889 - festividad del humilde Santo de Asís, en humilde casa de alquiler en la ciudad de las Mercedes - Provincia de Buenos Aire, en ceremonia presididita por el venerable Arzobispo Federico Aneiros: tal la fecha, el acto y el sitio de la Fundación de la Congregación de las Hermanas de San Antonio de Padua.

POBREZA Y SENCILLEZ

La modesta casa contaba solo con tres pobrísimas habitaciones, una de la cuales dividida por un biombo, hacia de oratorio y recibidor enteramente satisfecho de ver aquellas tres lamas en medio de tanta pobreza, abrazada voluntariamente por amor a Dios, no puede menos que conmoverse y bendecir a la Providencia al darles el Santo Hábito, que las tres reciben plan de gozo, muy en especial, la carismática Fundadora. Tomaría ella el nombre de Sor María Antonia y sus compañeras, los de Sor María de las Mercedes y Sor María del Socorro. Con Razón se les llamaría la "Casa de las tres Marías". El Hábito que viste es Blanco, de la Virgen de las Mercedes.

Dos años más tarde 20 de junio de 1891, se le dio permiso a la Madre y a Sor Socorro, para hacer Profesión religiosa y a cinco postulantes más, para tomar Hábito. En la oportunidad cambiarían por el Hábito de color avellana, según la usanza franciscana, por incomodidad del blanco para la asistencia a los enfermos en sus domicilios; causa para que Sor Mercedes se retire, pues su deseo era el de una Congregación más inclinada a la virgen de la Merced - Conservando el blanco; decisión que aflige a la Madre, quien nos obstante, conserva en su razón el ánimo sereno y firme. Presidió la ceremonia de Profesión y Toma del Hábito esta vez, el Padre Severino Álvarez - Vicario de Mercedes y poco afecto en principio, de la Obra; pero quien a partir de la fecha y en elocuente sermón, exhorta a la joven Comunidad a proseguir sin desfallecer.

ULTIMOS DÍAS

Así llegan los últimos días. a los 72 años de su vital existencia corriendo el año de 1911. A las 6:30 am del 2 de Noviembre y curiosamente en día de Celebración de Difuntos. allí estaría para cumplir su cita, entregando al Creador su feliz, fecunda y bendita alma, que en paz descansa. Toda Mercedes acompañó a las Hermanas y en la Parroquia de San Luis, celebran la Santa Misa de cuerpo a las Hermanas y en la Parroquia de San Luis, celebran la Santa Misa de cuerpo presente. Sus restos mortales reposan desde entonces en la Capilla de la Casa Madre. allí donde ella realizó su Obra - justo es que permanezcan eternamente. Así sea.